Imagínate que eres la responsable social media o el community manager y estás trabajando para una organización de carácter internacional o para una empresa que opera en diferentes mercados, -o quiere enfocar sus esfuerzos en posicionarse sobre aquellos mercados en los que aún no está-, y a ti te encomiendan la labor de crear la estrategia social media.
Cuando estés en el meollo del asunto, te encontrarás con algunas dudas que son muy normales, pues son gajes del oficio. Algunas que aparecerán por tu cabeza serán: ¿cuántas cuentas o perfiles en redes sociales debes crear? ¿Un perfil de twitter por cada segmento de mercado? ¿Por cada país? ¿Una fanpage en Facebook para crear una sola comunidad de tu marca? ¿Un perfil de empresa en LinkedIn donde publiques todas aquellas noticias de tu organización y dinamizar todos los contenidos que abarquen todas las necesidades de los públicos a los que te quieres dirigir? Ésta es una de las dudas que muchos nos planteamos a la hora de llevar a cabo una estrategia de redes sociales. A veces, si creamos tantos perfiles sobre una marca, más que segmentando a tu audiencia, estás haciendo que la imagen de tu marca pierda coherencia, consistencia e identidad. Pero, como todo, tiene sus pros y sus contras. Depende de cómo se mire.
Ya sabéis que lo que a una empresa le funciona en redes sociales, a otra no le funciona tan bien. ¡Depende de tantos factores!

A continuación, os enumero algunos criterios para poder analizar bien nuestra situación y determinar por cual opción decantarnos.
- Volumen de trabajo
¿Tenemos mucho volumen de trabajo? ¿Qué volumen de publicaciones tenemos que publicar? Si tenemos un gran volumen de trabajo, lo mejor es centrarse en dinamizar aquellos canales principales de la marca, enfocarse en aquellos mercados más representativos porque ahí van a estar ese público potencial que queremos que más se interese por lo que ofrecemos (contratación de nuestros servicios, hacer que nos compren nuestro nuevo producto, etc).
- Recursos humanos
¿Tenemos un equipo de trabajo en nuestra área? Dependiendo del personal que forme parte de nuestro equipo, así se llevará a cabo la creación y ejecución de nuestra estrategia social media. Se puede crear un equipo o varios equipos de trabajo donde cada uno gestione las cuentas de cada país.
- Barrera lingüística
Si estamos trabajando en una organización y no tenemos muchos recursos para que nos puedan facilitar los contenidos traducidos, mejor que no nos metamos en crear tantas cuentas como países se encuentre nuestra organización. Aunque Google Translate sea la panácea de la traducción automatizada, la gestión de contenidos en diferentes idiomas supone un gran trabajo: el de la traducción correcta y adaptada a cada mercado. No siempre tenemos la posibilidad de traducirlos adecuadamente o contamos con los recursos económicos necesarios para externalizar el servicio a un traductor o traductores.
- Tipo de organización y negocio.
Otro de los aspectos más importantes para tener en cuenta, sería el tipo de negocio que tiene nuestra organización. Si, por ejemplo, trabajamos en un blog colaborativo y publicamos posts en varios idiomas y queremos darles difusión en redes sociales con el fin de hacer branding y generar notoriedad de marca, ¿sería necesario crear cuentas por cada país? Me atrevería a responder que no.
Si nuestra empresa se basa en un modelo B2C, o tenemos una e-commerce que opera en diferentes mercados internacionales, y nuestros objetivos se basan en aumentar nuestras ventas o reposicionar nuestra marca en ese país, sería necesario abrir una cuenta en red social por país.
En definitiva, como he dicho, la elaboración y aplicación de la estrategia social media depende de muchos factores, no sólo depende de nuestra capacidad y conocimientos en el área, sino del volumen de trabajo, recursos económicos y humanos que contamos, nuestros conocimientos en idiomas o los que puedan tener nuestro equipo, además del tipo de negocio o el tamaño que tenga nuestra organización.
Y vosotros: ¿por cuál opción os decantáis? 😉
Cristian S.