Pensar out of the box

Era el año 2014 y un servidor hizo su primera formación en emprendimiento. Realicé un curso de introducción en el BIE (Barcelona Institut d’Emprenedoria). Era una formación semipresencial que culminaba con la creación de una idea que pudiera llegar a ser proyecto o negocio. Hasta aquí todo normal.

En mi presentación explico que siempre me ha apasionado la idea de crear una necesidad –que es lo que todas las empresas del mundo hacen, aunque no nos demos cuenta-. Podemos dividir en dos esta parte:

  • Creación de la necesidad
  • Creación del producto o servicio que la pueda satisfacer

En ambas partes del proceso la creatividad es clave. Hay tantas definiciones de creatividad como personas creadoras. Volvamos al proceso, tanto en la creación de la necesidad como en la del producto podemos crear de dos formas:

  • Crear algo completamente nuevo, desde 0.
  • Modificar algo ya creado desde un punto de vista opuesto

A esta teoría de libro de economía me gustaría aplicarle la mentalidad out of the box, es decir, fuera de la caja, fuera de lo establecido, del establishment.

Un ejemplo que se ve todo mucho más fácil: hay la necesidad de limpiar manchas de ropa sin frotar. Seas millennial o seas jubilado esta necesidad existe. Teoría normal: se puede crear un detergente que, sin acción mecánica, limpie las manchas.

Hasta aquí, todo in the box. El problema es que sin acción mecánica (frotar) las manchas no se van, a pesar de que la publicidad nos diga que sí desde más 30 años: anuncio 1, anuncio 2, anuncio 3.

En el pensamiento out of the box, exprimiríamos nuestra creatividad y la solución podría ser, por ejemplo, la invención de un tejido que no se manche. Si bien en Japón están muy metidos en estos experimentos y ya han creado uno que repele muchas cosas.

Pues bien, con la idea del out of the box es donde más podemos experimentar y exprimir nuestra creatividad.

Mi propuesta final para el curso de 2014 era la creación de un centro de fitness el cual te pagase por su uso, es decir, tener una cuota de 60€ mensuales y, por cada día de gym, que te descontasen 2€ del siguiente mes. El primer gimnasio que te paga por ir. Para ello me documenté y después de leer que sólo 1/3 de clientes del gimnasio son usuarios habituales vi una posible oportunidad de negocio. Algunos compañeros me dijeron que esto era muy de locos. Bien, si lo era no lo sé, pero a día de hoy pagas un plus por la ducha de algunos centros y en EEUU tienen algo similar a mi idea.

Anécdotas aparte, el músculo creativo se ejercita también a base de darle duro, out of the gym en este caso. Si bien es cierto que la sociedad -o las grandes empresascoartan un poco esta libertad creativa y le ponen algunos límites es cuestión de ir más allá. Y puedes probar de molestarles un poquito (a las grandes empresas o a la sociedad) ya que a día de hoy es más importante que hablen de ti a que hablen bien de ti. ¿Cuántas campañas publicitarias denunciadas? Campaña denunciada, campaña eficaz.

¿Has pensado que tus necesidades del día a día también las pueden tener otras personas? No guardes tu truco, véndelo.

¿Has pensado que la cultura actual del now da pie a crear muchas necesidades? Mirad si da pie a crear que el now ha creado el slow. No me entretengo a explicar ambos movimientos, pero sí decir que el slow es un out of the box del now.

Hace relativamente poco se inauguraba la primera tienda física de Zara que no vendía ropa. Antes se inauguró la primera biblioteca sin libros en papel.

Y ahora, ahora puedes ser tu quien cree el out of the box del año.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *